Tortitas miau: un emprendimiento diferente y con su propia impronta
Ella es Wincky, creadora de “tortitas miau” tiene 23 años y la inspiración a emprender vino de su amor por los gatitos y las tortas.
“Desde chiquita que me gusta cocinar, siempre me gusto la Pastelería y fui aprendiendo sola, con videos de YouTube y el Gourmet (adoro a Osvaldo Gross), quise anotarme para estudiar pero es bastante caro y no lo podía pagar”.
Tortitas Miau nació por unos videos coreanos ASMR de decoración de tortas que Wincky veía por youtube. “Quise hacer algo diferente y ponerle mi impronta, mezclando un poquito todas las cosas que me gustan como los gatitos, tortas, princesas, anime, barbie, kitty y animal crossing”.
Al principio tenía miedo, no sabía cómo empezar ni por dónde hasta que después de pensarlo y con apoyo de su familia y pareja se la jugó y arrancó su emprendimiento. “No sabía muy bien cómo emprender entonces empecé a ver gente que ya estaba vendiendo, no solo tortas, sino cualquier tipo de producto. Mire cómo empezaron, cómo publicaban, cómo se comunicaban y se relacionaban con sus clientes. Fue aprendiendo de a poquito, es más sigo aprendiendo un montón”.
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La diferencia que tiene su marca es la impronta propia. Wincky trata de transmitir lo que es ella a través del diseño de las tortas, los dibujos y cómo se comunica. “Trato de darle siempre ese valor agregado para que estén felices y ansiosos cuando reciben sus tortitas. Me gusta que se sienta ese costado humano y no solo ser una marca. Muchas de las personas que me siguen comparten muchos de mis gustos. Eso lo hace más fácil. Nos recomendamos anime, juegos, cositas que vemos en Instagram”.
Como todo emprendedor, también hay dificultades en el camino. “Me cuesta mucho intentar superarme y aprender lo que no se. Fijarme cómo puedo innovar constantemente y hacer cositas nuevas que les guste a las personas que me siguen. A veces tengo miedo de hacer cosas que solo me gusten a mi y que no sean tanto lo que la gente busca”.
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Su mayor logro es ver cómo sus clientes comparten las tortas y su alegría. “me pone muy feliz cuando me envían un mensajito y me dicen que estaba rica, con quien la compartieron y si les gusto la decoración. Muchas veces me ayudan a hacer nuevos diseños de tortitas que no me hubiera imaginado y quedan increíbles. Todo eso me encanta y no lo esperaba”.
Wincky tiene un proyecto en marcha, pero por ahora es secreto. Pero su sueño es tener una cafetería en donde la mitad de las ganancias serían destinadas a tener un refugio de animales y que los clientes puedan visitarlos mientras comen una de sus tortas.
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